Por Andrés Ugarte Larraín

 

Era difícil suponer que un momento tan trascendente para estos protagonistas en particular podía llegar tan rápido. Si bien es común que en el polo los grandes jugadores se enfrenten asiduamente, lo que se vivirá el domingo será seguramente uno de los momentos más recordados del último tiempo, sobre todo por el contexto. Será el cuarto enfrentamiento en el año de Adolfo y Poroto Cambiaso con los hermanos Bartolomé y Camilo Castagnola; pero, que el escenario en esta ocasión sea ni más ni menos que una final de alto hándicap inglés, lleva el enfrentamiento a otro nivel.

 

Un par de victorias para los Castagnola en Inglaterra, triunfo para los Cambiaso en Estados Unidos, es lo que indica el historial entre ellos en 2020. Lamentablemente, hay cuestiones que no permiten disfrutar del acontecimiento en plenitud, como por ejemplo que los partidos sean a puertas cerradas, entre otras privaciones. Pero será algo histórico, porque hay un factor biológico que determina que no serán muchas las veces de aquí al futuro en que los 4 protagonistas en cuestión vayan a compartir cancha en lo que a competencias de esta jerarquía respecta. Se descarta que los 3 primos definirán un sinfín de títulos en el futuro, pero la presencia de Adolfo Cambiaso, con una vigencia que no sorprende en absoluto -y por su mera figura en sí, sobre todo-, le aporta un mayor atractivo al choque. 

 

“Estoy muy contento de jugar esta final, de poder acompañar a Poro en este pase, en este final de mi carrera que se conecta con el principio de la de él, trasladarle mis experiencias. Y compartir con tu hijo una final así es muy lindo, independientemente de ganar o perder”, afirma Adolfo Cambiaso en diálogo con Pololine.

 

Literalmente, tanto a su hijo como a sus sobrinos los vio nacer, más allá de que el contexto en esta ocasión sea diferente al de aquellos años. Pero la sangre es la sangre, la genética es la genética, y es algo que se impone también a la hora de hacer un análisis. “Es un orgullo para mí jugar esta final contra los Castagnola, son hijos de mi hermana; y pienso también en que Poroto capaz algún día pueda jugar con ellos. No me extraña su avance, como no me extraña tampoco el avance de Poroto, por el sólo hecho de que se dedican y le ponen muchas ganas, y eso es lo más importante: se dedican, le ponen ganas y les gusta. No me sorprende que mejoren día a día. El nivel de los Castagnola no me sorprende; al contrario, es lindo para que haya renovación en el polo, está muy bueno”, sostiene el hombre de Next Generation.

 

Será para Adolfo Cambiaso la posibilidad de alzarse con el Abierto Británico por séptima ocasión -octava si consideramos que en 2005 se lesionó en la semifinal, y que su equipo de entonces, Dubai, terminaría alzándose con el título-, aunque en esta caso cabe recordar que hay que retrotraerse a 2014 para encontrar su última victoria en el certamen. En aquella ocasión festejó vistiendo los colores de Dubai, con alguien que estará acompañándolo nuevamente este domingo: Diego Cavanagh, reemplazante de David Stirling, y quien se ha convertido en pieza fundamental en el seno de La Dolfina. Antes mencionábamos la vigencia de Cambiaso; y que su primer título en la Gold Cup haya sido en 1991 -en aquella oportunidad fue con Tramontana-, no hace más que respaldar aún más este concepto.

 

Hablar de final inolvidable para Adolfo Cambiaso puede sonar como frase hecha, pero él se ocupa de ir incluso un poco más allá con respecto a lo especial que será jugar la final de la Gold Cup este domingo: “¿Còmo no voy a estar disfrutando con mi hijo? Jugar una final así no sé si se me va a volver a dar en mi vida; lo que sí, me gustaría retirarme jugando un Abierto con él. Ganar no me importa, pero poder estar compitiendo con él al más alto nivel es increíble, sabiendo que yo tengo 45 y que él tiene 14 y es muy chico. Ganar o perder es anecdótico, estar jugando esta final es increìble”.

 

Como decíamos, el contexto hace que sea una final diferente por todas las medidas que se han tomado, que no permiten disfrutar del evento como uno quisiera. “Se disfruta, obviamente; pero la pandemia y todo eso hace que esté todo raro”, asegura el de Cañuelas. Y cierra: “Pero estamos contentos; y siempre agradecido a Valiente, a Bob Jornayvaz, por darnos caballos, prestarnos caballos. Y agradecido a Jean Francois Decaux, que nos dio la posibilidad de jugar semejante torneo juntos, agradecido de que haya creído en mí, que tengo 45 años, y en mi hijo, de 14. No fue fácil, pero creyó en nosotros, y estamos en la final”.

 

FINAL GOLD CUP FOR THE BRITISH OPEN: NEXT GENERATION vs LES LIONS/GREAT OAKS

NEXT GENERATION: Jean Francois Decaux, Poroto Cambiaso, Diego Cavanagh, Adolfo Cambiaso.

LES LIONS/GREAT OAKS: Camilo Castagnola, Dillon Bacon, Bartolomé Castagnola, Santiago Laborde.

KICK-OFF: Cowdray Park Polo Club, domingo 26 de julio 3pm.