El jueves por la mañana el mundo del polo recibió la triste noticia del paso a la eternidad de Claire Janet Lucas, a los 77 años, ícono histórico entre las mujeres que han jugado al polo, pieza fundamental del polo inglés y considerada una de las mejores de la historia, llegando a los 5 goles de hándicap. Además, fue la primera mujer en ganar The Queen’s Cup, en el año 1979. Definitivamente, Claire Tomlinson deja un legado eterno, siendo también una criadora reconocida además de coach del seleccionado nacional inglés. 

 

Uno de sus hijos, Mark, la recuerda de esta manera: “Mamá llegó a 5 goles de hándicap en los años ‘80, una marca que nunca fue superada, fue la de mejor hándicap en la historia. Fue la primera mujer que jugó 22 goles en Inglaterra. Cabe aclarar que en esa época estaba prohibido para una mujer jugar el alto hándicap, y tuvo que hacer firmar una carta por todos los profesionales de esa época, indicando que estaba en perfectas condiciones de jugar, y se cambió la regla”.

 

Y completa: “Fue una de las primeras coaches. Fue pionera en varias cosas, y siendo mujer fue algo único en ese momento: ganadora de la Queen’s Cup, de la Royal Windsor. Y con una conexión muy importante con los argentinos; muchos han pasado las temporadas inglesas en casa: Milo Fernández Araujo, Juni Crotto, Pepe Araya, Sergio Boudou y Martín Aguerre son sólo algunos. Compró un campo en 25 de Mayo hace 40 años más o menos. Argentina ocupaba un lugar muy especial en su corazón. Hablaba como una argentina, y gracias a eso nosotros hablamos así. Creo que también hay otras cosas, como la cría, que fue una de las únicas personas que crió con éxito caballos de polo acá en Inglaterra. Ella arrancó la cría como hace 40 años con base de sangre argentina”. 

 

Entre todos los mensajes que recorrieron las redes sociales recordando a Claire Tomlinson, quien estuvo acompañada de sus 3 hijos hasta último momento, se destaca uno muy especial y sentido que le dedicó Milo Fernández Araujo en su cuenta de Instagram (@milofaraujo): “Te voy a recordar con muchísimo cariño, nunca me voy a olvidar de todo lo que me dijiste, me enseñaste y lo que te cansaste de retarme en los woods para que ande mejor a caballo; cuántas historias escribimos juntos, todas lindas, algunas con sufrimiento y otras con muchísima alegría. Cuántas copas nos ganamos y cuántas garroteadas nos comimos, pero qué lindo todo el tiempo compartido con vos, Luck, Mark, Emma y Simon. Todos tenemos alguien que nos da una mano cuando empezamos, y vos fuiste la primera persona que confió en mí y me diste mi primera oportunidad en Europa, ahí empezamos una amistad que no paró de crecer, fuiste la mama que no tuve y te doy muchas gracias por eso. Te voy a extrañar muchísimo, Vieca, y no pienso despedirme, sólo decirte que hasta pronto”.